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Pinceladas Ѣ€“ y 5

Santiago Niño Becerra - Martes, 17 de Febrero

83 Ѣ€" Lo anterior conecta con algo que, en principio, parecería que tiene muy poco en común: los zapatos. Hace unos días me remitieron un PowerPoint sobre una marca hindú de zapatos femeninos, tal vez lo hayan visto. En las primeras fotos tiendas maravillosas con modelos de ensueño sobre estantes en los que parecían joyas iluminadas con estudiados focos que realzaban la perfección de las creaciones; tras siete u ocho fotos de semejantes características, el infierno: personas hacinadas, amontonadas en infectos lugares manejando unas primitivas herramientas, o ninguna, fabricando a cambio de un plato de comida y de un techo -el mismo techo bajo el que trabajaban-, aquellas maravillas de las fotos anteriores.

ilustraciónA la luz de la mera racionalidad económica, es verdaderamente curioso lo que acontece con esa marca de zapatos -con esa y con otras miles de marcas y con cualquier objeto que sea fabricado en un país subdesarrollado o en un área artificialmente, o no, subdesarrollada de un país desarrollado-: esos zapatos existen porque existe la miseria que los elabora, si no existiese tal miseria, hoy tan sólo estarían al alcance de tres archimultimillonarias, el PIB sería bastante más reducido, y esas personas míseras que fabrican esos zapatos, o no habrían nacido, o ya habrían fallecido, por lo que no podrían generar ese PIB. (Existe otra opción, hoy inalcanzable: que esos zapatos sean elaborados por tecnología con cero unidades de factor trabajo).

La pregunta es si en términos de recursos escasos es rentable elaborar esos zapatos del modo como actualmente están siendo elaborados y en el número que están siendo elaborados. Hoy nadie se formula esa pregunta porque el objetivo ha sido, únicamente, generar PIB, pero falta poco para sea formulada.

84 Ѣ€” Ya se está adelantando: protestas sociales: las habrá. Y será comprensible. En China, en Francia, en Argentina, en cualquier parte. Y será entendible. Distintas cúpulas han estado diciendo que todo iba bien, que todo continuaría yendo bien, a la vez que daban crédito a manos llenas; y lo peor: la gente, el 99,99%, se creyó todo lo que le decían. El PIB aumentó -¡que bien!, ¡que bien!-, debido a que la gente se creyó que todo iba bien y que así seguiría, por lo que se endeudaron hasta las cejas (“gente” = Gobiernos + empresas + familias + individuos).

Ahora, esas mismas cúpulas dicen que se acabó la fiesta, y que lo que viene, aunque camuflan la realidad y tergiversan la información creando falsas expectativas, viene duro muy duro. El problema es que perder el 15% de una “riqueza” cuando la suma de esta asciende a un número de diez cifras es muy diferente que perder el mismo porcentaje cuando la suma de la riqueza asciende a un número de solo cuatro cifras; y ese caso es y va a ser el mayoritario.

¿Qué se hará ante esas protestas sociales?; pienso que se subsidiará el desempleo: la no necesidad de factor trabajo: de ningún factor trabajo más que el estrictamente necesario; que se subsidiará con la subsistencia; con un modelo de protección social a la baja, devaluado. Subsidiar con subsistencia algo no necesario: difícil de asumir, ¿verdad?, y eso aquí, ¿se imaginan que puede suceder allá?.

85 Ѣ€” Repsol (como ejemplo) quiere / necesita / busca / precisa reducir costes; bien, nada anormal, algo lógico en estos tiempos. Lo verdaderamente novedoso, lo encomiable, ante lo que hay que quitarse el sombrero es que lo diga, que lo manifieste, que, casi, casi, haga bandera de ello. Y, ¿por qué es tan importante que lo diga?, pues porque eso indica que quienes deben tenerlo tienen el tema absolutamente interiorizado.

Durante los próximos años crecer en ingresos va a ser, en términos medios, extraordinariamente difícil, lo que no significa que no haya compañías que incrementen sus ingresos; pero el truco no va a estar ahí, sino en la óptima utilización de los recursos de que se dispongan, y para llegar ahí lo primero hay que reconocer la situación y hacerla tuya.

La compañía energética que estamos comentando lo matizará de cara a los medios todo lo que quiera (aún no se puede decir que el objetivo es ahorrar la pela: aún no mola decirlo), pero a partir de ya va a empezar a mirar el céntimo; ¡como ya tiene que ser!. (¿Se imaginan que al igual que los rankings de ingresos han sido en el pasado el termómetro en el que inversores de todo pelaje se fijaban para tomar sus decisiones sean ahora rankings de ahorros en costes los que comiencen a marcar las diferencias?; entre nosotros: no me extrañaría).

86 Ѣ€” The UK: General Elections: en 2010, o cuando sea. ¿A que el próximo Gobierno británico es de coalición?. ¿Debido a la aritmética política?, ¡en absoluto!; ¿por convencimiento?, ¡no, que va!: por pura necesidad: todos juntos decidiendo qué hacer. Lo que antes se denominaba un “Gobierno de unidad nacional”. Se van a tener que hacer cosas gordas, muy gordas, y la única posibilidad va a ser la desaparición de la oposición continuando siendo demócratas. No, no será como los Pactos de la Moncloa, aquello fue otra cosa.

87 Ѣ€” El Tigre Celta: ¿quién se acuerda hoy de él?. Ya lo dijimos: un despropósito abonado para generar pasta para algunos. En fin.

Santiago Niño Becerra. Catedrático de Estructura Económica. Facultad de Economía IQS. Universidad Ramon LLull.