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Iceberg

Santiago Niño Becerra - Lunes, 01 de Diciembre La operación Repsol Ѣ€" Lukoil es un iceberg. La parte visible -1/10- es el tema financiero: Sacyr tiene una deuda de muerte a la que, pienso, no puede hacer frente; la Caixa, Mutua Madrileña, etc, necesitan, al igual que tantas compañías financieras y no financieras, pasta y/o liberar deuda; y toda la operación se hace cambiando papeles de manos. Todo muy limpio, muy barato y muy simple. Pero en un iceberg existe una parte sumergida: 9/10.

En la operación Repsol Ѣ€” Lukoil esos 9/10, pienso, son parte de una estrategia a largo plazo en la que “lo financiero” es lo menos importante; una estrategia en la que intervienen muchos protagonistas y todos con un común denominador: el petróleo como recurso muy escaso, imprescindible y caro, muy caro, a pesar de los 25 dólares a los que algunos expertos dicen que, a medio plazo, apunta el precio del crudo.

En esa estrategia a largo plazo Lukoil estaría desempeñando el papel de “agente infiltrado” en Europa del Sur y Latinoamérica de lo que podría ser la futura Corporación Mundial del Petróleo: muy curioso es que se esté produciendo este acercamiento entre Lukoil y Repsol coincidiendo con el retorno de Rusia a Latinoamérica.

Por otra parte, el acercamiento de la empresa rusa a la española no ha estado exento de ¿dobles intenciones?. Gazprom, no: es rusa y es pública; Lukoil sí porque es privada, pero, ¿alguien piensa realmente que una compañía petrolera puede hacer lo que le sale de allí por muy privada que sea?.

La ASPO, la Association for the Study of Peak Oil and Gas, cuyo último congreso se celebró en Barcelona el pasado mes de Octubre -¿casualidad casual?- calcula en los alrededores del 2012 el momento en el que se situará el peak oil del planeta: el momento en el que se habrá extraído la mitad de las reservas de los yacimientos descubiertos (y ya apenas se descubre petróleo nuevo: por cada cuatro unidades de petróleo que se consumen, se está descubriendo una),

Lo que implica lo dicho es que los costes de extracción se dispararán (siempre sucede: es una ley inmutable: cuando se alcanza el peak oil de un yacimiento, los costes de extracción se incrementan brutalmente); pero a la vez, y aunque durante la crisis que se nos viene encima el incremento de demanda se enlentezca, la tendencia de esta es al alza, tendencia que se acelerará a partir de que comience, hacia el 2015, la recuperación de la crisis, lo que aún tensionará más los precios (y aunque la ASPO se equivoque en un par o tres de años, da lo mismo).

¿Escenario petrolífero planetario en un horizonte de diez años?: tremebundo. De entrada, recuerden que la crisis en la que estamos entrando va a serlo de recursos: falta y/o disponibilidad y/o accesibilidad y/u oferta; luego piensen que aunque la recuperación de la crisis esté basada en la eficiencia y en la productividad, la tendencia de la oferta de commodities es decreciente, luego por mucho que la productividad de los inputs aumente, y por mucho que se regule el consumo de los recursos, va a haber falta de commodities, de algunas más que de otras, y de las más esenciales, más.

En ese entorno, en el 2018 Ѣ€” 2020, es donde, pienso, debe situarse el interés de Lukoil por Repsol. Es una jugada a largo plazo en la que, además, se arriesga muy poco debido a la particular situación financiera de algunos de los participantes. En otras palabras: llegará a término, o no, pero tiene toda la lógica del mundo; diga lo que diga el Gobierno, y diga lo que diga el principal partido de la oposición. Es decir, la operación Repsol Ѣ€” Lukoil se hará, o no, poco importa: va a haber otras muchas igual.

Como guinda del pastel, Repsol. Repsol, entiendo, tiene tres problemas graves. Por un lado, es suficientemente pequeña como para ser absorbida, total o parcialmente y con relativa facilidad, por otra petrolera; por otro, no es suficientemente grande como para plantearse absorber a otra petrolera de cierta importancia; por otro más, y puede que sea el más importante, cuenta con pocas reservas de crudo, por lo que tiene poco que decir en el mundo ya oligopolizado del petróleo.

Iceberg: 1/10 y 9/10, más o menos, como un trozo de hielo introducido en un whiskey de, ¿veinte años?.

(Lo he dejado para el final. Es una pregunta y no la voy a responder. En base a lo que va a pasar con el crudo, ¿cuánto vale una compañía petrolera?).

(No cambio de tema, “¿No?”, no. Se habrán enterado del llamamiento que el pasado Jueves realizó el President de la Generalitat de Catalunya, el Señor Josep Montilla, desde una emisora de radio a fin de que quienes puedan hacerlo porque no perciban ningún impedimento en su situación económica actual, consuman. Interpretaciones puede haberlas de todos los colores, pero, a mí, a lo que me suena esto es a puro llamamiento para ganar unos días, para pasar la Navidad, y luego ya veremos.

Hay quienes han querido ver tintes patrióticos en las palabras del Honorable, yo, la verdad, no; lo que veo es puro temor por la economía, catalana, en este caso, y pide ayuda a quien pueda darla: al pueblo. Sólo le faltó añadir “por favor” y “es necesario”. ¿Qué harán las/los presidentas/es de otras regiones?, ni idea, pero seguro que a alguna/o se le habrá ocurrido hacer algo parecido si piensa que sus palabras servirán para aumentar el consumo.

¡Lo mal que deben estar las cosas y lo poquito que nos cuentan!).

Santiago Niño Becerra. Catedrático de Estructura Económica. Facultad de Economía IQS. Universidad Ramon Llull.

@sninobecerra

Santiago Niño-Becerra. Catedrático de Estructura Económica. IQS School of Management. Universidad Ramon Llull.




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